5 cosas que hacer en Gijón

Aunque soy vallisoletana y llevo muchos años viviendo en Madrid, siempre me he sentido un poco asturiana y es que mi vida está muy ligada a esta tierra. Mi abuela nació en un pueblo precioso de Ribadesella, en una casa de indianos a la que siempre nos hemos referido como "La Casona" y en la que he veraneado desde que me alcanzan mis recuerdos, al menos 30 años, hasta este último verano en el que hemos cambiado la tranquilidad del pueblo por el bullicio de Gijón.

He ido infinidad de veces a Gijón pero nunca había pasado suficiente tiempo como para vivir la ciudad y recorrerla a fondo, así que este pasado mes de agosto ha sido atípico y maravilloso a la vez, porque es muy fácil enamorarse de esta ciudad asturiana.

Os voy a dar cinco recomendaciones super sencillas para disfrutar de la ciudad sin mayor complicación, más allá de ir a la playa, que obviamente es mi primera opción para pasar el día cuando el tiempo acompaña. A mi me gusta ir a la Playa de San Lorenzo pero hay gente que prefiere la Playa de Poniente.

Si vais, os recomiendo acudir a una oficina de información turística para que os faciliten la oferta cultural, que es muy extensa, y el programa de eventos, festividades y demás celebraciones porque seguro que os topáis con alguna ;-)

PERDERSE POR EL CASCO ANTIGUO Y LAS CALLES DEL CENTRO

Palacio de Revillagigedo y Monumento a Don Pelayo

Dicen que perderse por las ciudades es la mejor forma de descubrirlas, callejeando sin rumbo fijo es cuando se encuentran los rincones más especiales. A mi me encanta el ambientillo que hay en torno a la Plaza Mayor, las terrazas, los edificios antiguos con encanto...

Calle Covadonga esq. Paseo Begoña. Iglesia de San Lorenzo 

Plaza Campinos de Begoña

Paseo de Begoña

Calle Corrida

Os sorprenderá la cantidad de comercios de todo tipo que encontraréis en Gijón, la Calle Corrida es una de las más comerciales y transitadas de la ciudad. Además, siempre encontraréis terrazas, cafeterías, pastelerías, heladerías... en las que sentarse un rato a reponer fuerzas.

A mi me llama la atención la cantidad de perfumerías y tiendas infantiles que hay. La oferta de pequeño comercio es también interesantísima y como os decía antes, merece la pena perderse por las callejuelas para encontrar auténticos tesoros y tiendas pequeñitas con mucho encanto.

PASEAR A LA ORILLA DEL MAR

Paseo del Muro de San Lorenzo

El mar me recarga las pilas, creo que no hay para mi un sonido más relajante que el rumor de las olas. Junto al ordenador tengo una caracola (que habéis visto en muchos posts) y de vez en cuando me la pongo en la oreja mientras trabajo, es lo más cerca que uno puede sentir el mar en Madrid.

Pero, aprovechando que uno está tan cerca del mar, no hay nada como pasear a la orilla, sintiendo la brisa en la cara... qué placer. El Paseo del Muro de San Lorenzo es uno de mis sitios favoritos para pasear.

Si lo sigues en dirección opuesta a Cimadevilla (el centro) y atraviesas el Río Piles bordeando el mar, además de darte un buen paseo, podrás observar las que son para mi, las mejores vistas de Gijón y paisajes como estos que capturé en un día un poco nublado. Es lo que se conoce como la Senda del Cervigón, que llega hasta el límite con el concejo de Villaviciosa, una ruta muy recomendable.

Playa del Rinconín

Senda Litoral del Cervigón

LOS ATARDECERES Y PUESTAS DE SOL

Cuando cae la tarde y el sol se empieza a esconder entro en modo japonés y tengo que hacer fotos, allá donde esté. En la zona costera del Sur, las puestas del sol son muy espectaculares porque el sol se pone por el mar y crea un efecto precioso pero en el Norte también tienen su encanto. 

Las nubes juegan con el sol y ninguna puesta de sol es igual a la anterior, el cielo se tiñe de tonos amarillos, naranjas y rosas ofreciéndonos unos paisajes increíbles: 

Monumento a la Madre del Emigrante

Puerto deportivo de Gijón

Jardines de la Reina

DISFRUTAR DE SU GASTRONOMÍA

Que en el Norte se come de maravilla y en cantidades abundantes no es ningún secreto y Gijón no iba a ser menos. Hay infinidad de restaurantes y sidrerías en las que degustar manjares como los que os enseño en estas fotos. Aprovechad para comer el pescado y marisco fresquísimo del Cantábrico.

Pastel de Cabracho y chipirones encebollados

El Pastel de Cabracho es un plato que me chifla, lo suelen presentar con tostaditas y un poco de mayonesa para untar a modo de paté. En el restaurante El Palacio (pegando al Palacio de Revillagigedo) lo ponen riquísimo. Los chipirones encebollados también estaban de muerte, por cierto ;-)

Y no podía faltar el cachopo, que de un tiempo a esta parte se ha puesto muy de moda y lo he visto incluso en restaurantes de Madrid. No es más que dos filetes de ternera rellenos de jamón serrano y queso y empanados como si fuera un escalope. Sobra decir que está buenísimo.

Mi amiga gijonesa Wayaiu me llevó a probar uno de los mejores cachopos que he comido (que no es el de la foto, estábamos tan hambrientos que nos lo zampamos sin hacer foto ni nada) en la Sidrería Tropical (Avda. Rufo García Rendueles, 3).

Además del clásico tenían diferentes versiones: relleno de cecina y queso de cabra, de setas... En otros sitios lo ponen con salsa de cabrales o incluso de pollo en vez de ternera, la variedad es infinita.

DAR UNA VUELTA POR EL PARQUE DE ISABEL LA CATÓLICA

Yo decía que este parque era el equivalente a El Retiro, por donde me encanta pasear cuando estoy en Madrid. El Parque de Isabel la Católica es super agradable, con mucha vegetación, diferentes especies de aves y un lago enorme en el que nadan patos y cisnes. Un lugar perfecto para desconectar, hacer deporte y respirar aire puro.

Y hasta aquí mis recomendaciones personales. Bueno, os dejo una más de regalo y es vivir la noche gijonesa. En la zona de Cimadevilla y en el Puerto hay muchísimo ambiente y una amplia variedad de locales en los que tomar una copa, bailar y pasarlo bien.

¿Y qué me decís del paisaje nocturno gijonés? Si preferís un plan tranquilo, encontraréis a mucha gente recorriendo el paseo, sentada en la arena y disfrutando de estas vistas y el sonido del oleaje.

¿Conocéis Gijón? ¿Qué os ha parecido este recorrido por la ciudad? ¿Sois de los que se van en septiembre, de los que vuelven o de los que ya no recuerdan si se fueron de vacaciones alguna vez? Yo soy de los segundos pero ya me estoy empezando a sentir como los terceros ;-)

¡¡FELIZ DÍA!!