Nuxellence Jeunesse, el primer paso de mi rutina de belleza

¿Recordáis cuando los serums irrumpieron en el mercado y poco a poco se fueron convirtiendo en un básico en nuestro neceser? Pues me ha vuelto a ocurrir y os lo adelanté ya en los Favoritos de diciembre y enero. He incorporado un nuevo paso a mi rutina diaria de belleza, el primero de todos: Nuxelllence Jeunesse, de Nuxe. Este fluido se debe aplicar sobre el rostro antes de cualquier otro tratamiento por la mañana y/o noche porque consigue potenciar su efecto además de dar mucha luminosidad y frescura al rostro.

Pero ¿cómo funciona Nuxellence? Para que lo entendáis mejor, en Nuxe comparan nuestras células con la batería de un teléfono. Día tras día se descargan y para que puedan funcionar correctamente y producir todos los elementos esenciales que necesita la piel, como colágeno o elastina, necesitan cargarse de energía. Se ha demostrado que el ADN mitocondrial es clave en la producción de energía celular, pero es tan frágil que las agresiones externas a las que estamos expuestos a diario (estrés, contaminación, rayos UV, radicales libres...) lo dañan y lo alteran, de modo que las células se descargan, con el consiguiente envejecimiento de la piel, que responde peor a los tratamientos.

Y aquí es donde interviene Nuxellence, protegiendo y reparando el ADN mitocondrial para prolongar la juventud de la piel y favorecer que se muestre más receptiva a los tratamientos que se apliquen después. Para ello se han empleado los extractos florales de Pasiflora, Anchusa y Amapola que han demostrado más de un 43% en reparación del ADN mitocondrial alterado. Otros de sus ingredientes son la caléndula, semillas de araucaria, ácido hialurónico de origen natural y hojas de galanga para alisar arrugas y líneas de expresión; raíz de maca para activar la microcirculación; células de cacao y hojas de olivo para homogeneizar el tono y pigmentos correctores para devolver la luminosidad y sublimar la piel.

Modo de empleo y resultados
Como os indicaba al principio de la entrada, Nuxellence se debe aplicar antes de cualquier otro producto. Al ser tan fluido, dos pulsaciones son suficientes para rostro y cuello, se extiende de maravilla y se absorbe prácticamente en segundos, lo que lo hace muy cómodo, pues no es necesario esperar antes de aplicar nuestro serum o crema habitual. A mi me gusta usarlo por las noches y como tratamiento único cuando noto la piel un poco más grasa, pues hidrata suficiente y no engrasa. Si la tengo algo más seca, aplico después la Crème Prodigieuse Nuit, también de Nuxe.

Nuxellence se ha convertido además en uno de mis truquitos para conseguir una piel radiante por las mañanas cuando he dormido poco o antes de maquillarme, especialmente si me encuentro cansada porque proporciona luminosidad y frescura al instante. Otro punto a su favor es que, como todos los productos Nuxe, tiene un olor muy delicado y agradable, por lo que el ritual de belleza es una auténtica delicia. Se presenta en un envase muy original y práctico, con un dosificador que se esconde en el propio envase con sólo un giro, preservando las propiedades del producto y protegiéndolo de golpes. Es perfecto para llevar en la maleta sin sufrir desagradables incidentes. Su precio es 52,90 € (50 ml) y cunde mucho porque no hay que usar mucha cantidad en cada aplicación.

¿Sabíais que nuestras células necesitan recargarse de energía cada día? ¿Conocíais Nuxellence? ¡Gracias por leer y comentar!

¡¡FELIZ Y ENÉRGICO JUEVES!!